Jesús, el Hijo de David

Autor: Raegan Wolff

Mateo 21:12-22

Purificación del templo
(Mr. 11.15-19; Lc. 19.45-48; Jn. 2.13-22)

12 Y entró Jesús en el templo de Dios, y echó fuera a todos los que vendían y compraban en el templo, y volcó las mesas de los cambistas, y las sillas de los que vendían palomas; 13 y les dijo: Escrito está: Mi casa, casa de oración será llamada; mas vosotros la habéis hecho cueva de ladrones.

14 Y vinieron a él en el templo ciegos y cojos, y los sanó. 15 Pero los principales sacerdotes y los escribas, viendo las maravillas que hacía, y a los muchachos aclamando en el templo y diciendo: ¡Hosanna al Hijo de David! se indignaron, 16 y le dijeron: ¿Oyes lo que estos dicen? Y Jesús les dijo: Sí; ¿nunca leísteis:

De la boca de los niños y de los que maman

Perfeccionaste la alabanza?

17 Y dejándolos, salió fuera de la ciudad, a Betania, y posó allí.

Maldición de la higuera estéril
(Mr. 11.12-14,20-26)

18 Por la mañana, volviendo a la ciudad, tuvo hambre. 19 Y viendo una higuera cerca del camino, vino a ella, y no halló nada en ella, sino hojas solamente; y le dijo: Nunca jamás nazca de ti fruto. Y luego se secó la higuera. 20 Viendo esto los discípulos, decían maravillados: ¿Cómo es que se secó en seguida la higuera? 21 Respondiendo Jesús, les dijo: De cierto os digo, que si tuviereis fe, y no dudareis, no solo haréis esto de la higuera, sino que si a este monte dijereis: Quítate y échate en el mar, será hecho. 22 Y todo lo que pidiereis en oración, creyendo, lo recibiréis.

Reina-Valera 1960 ® © Sociedades Bíblicas en América Latina, 1960. Renovado © Sociedades Bíblicas Unidas, 1988. Utilizado con permiso. Si desea más información visite americanbible.orgunitedbiblesocieties.orgvivelabiblia.comunitedbiblesocieties.org/es/casa/www.rvr60.bible

El siguiente evento que Mateo registra en su evangelio después de la entrada triunfal de Jesús es la purificación del templo. Después del humilde paseo en el pollino de un burro, leemos sobre los actos justos de indignación de nuestro Señor en respuesta al desdén y falta de respeto de la élite religiosa hacia el templo.

El templo era una representación de la santidad de Dios. Era donde los judíos iban para ser limpiados de sus pecados mediante sacrificios realizados en su nombre por los sacerdotes. Es interesante que el lugar donde se llevaba a cabo la purificación del pueblo necesitara purificarse también.

Después de voltear las mesas de los animales para el sacrificio y reprender a los cambistas, vemos a los ciegos y los cojos acercándose a Jesús en el templo, y él los sana, mientras que los niños en el templo están clamando: “¡Hosanna al Hijo de David!”

El título, Hijo de David, era sinónimo de El Mesías, el ungido prometido hace mucho tiempo y muy esperado por los israelitas. Este Hijo de David vendría de la línea del más rey más grande que Israel había tenido, el rey David. Este Hijo de David establecería un reino eterno que reinaría para siempre. Hay otras ocasiones en el Nuevo Testamento donde Jesús es llamado Hijo de David, y todas esas referencias tratan sobre sanidades, la purificación de enfermedades o dolencias, y reconocimientos de Jesús como el Mesías tan esperado.

Cuando los principales sacerdotes y los escribas escucharon el nombre que se le daba a Jesús, se indignaron y le pidieron a Jesús que diera cuenta de ello, lo cual hace citando el Salmo 8:2, ” En los labios de los pequeñitos y de los niños de pecho has puesto tu alabanza”.

¿Quién sino el Mesías, el Hijo de David, tenía la autoridad para reprender las actividades desagradables y los vendedores deshonestos y codiciosos que se aprovechaban de la gente que iba al templo? Este Hijo de David pronto reemplazaría el templo físico necesario para limpiar a las personas de sus pecados al hacer el sacrificio supremo. Él desecharía las estructuras dadas por Moisés al cumplir con los requisitos del sacrificio. Él, el Hijo de David, abriría un acceso directo al templo mediante su muerte y resurrección.

Jesús, el Hijo de David, observó la degradación del templo, expuso su uso incorrecto al mostrar la avaricia y el mal comportamiento, y luego sanó a aquellos a quienes no se les permitía entrar en el templo debido a su impureza. Qué hermosa imagen de cómo Jesús también nos sana y nos purifica hoy. Solo él puede limpiarnos de nuestros pecados, solo él puede sanar nuestras enfermedades, solo él nos dignifica, y solo el Hijo de David, el Mesías, puede reestablecer nuestra relación con el Padre.

¿De qué manera las acciones de Jesús en el templo anticipan su sacrificio final y el establecimiento de una nueva forma para que la humanidad se acerque a Dios? ¿Cómo se relaciona esto con nuestra comprensión de la salvación y redención a través de Jesucristo?

6 thoughts on “Día Dos | Semana Santa 2024

  1. Las acciones de Jesús nos recuerdan que solo El tiene la autoridad para hacer cuando él quiere. Nos llena de esperanza y amor saber que le importamos. Gracias Dios por enviar a tu hijo a morir por nosotros.

  2. Que hermosa imagen el ver a Jesús sanando a aquellos que no se les permitía entrar. Gracias a Jesús podemos entrar confiadamente delante del trono de la gracia ¡Él nos ha limpiado!

  3. De la misma manera que volcó las mesas y limpió el templo, Jesús limpia nuestros pecados y restaura nuestra vida si se lo permitimos. Él nos da la verdadera Vida Eterna y es solo por Su gracia.

  4. Así cómo entro y purifico el templo y luego sanó a los enfermos ,hoy en día el Señor nos limpia de todo pecado y nos sana para así alcanzar la salvación

  5. Dios sabe las motivaciones por las que nos acercamos a Él. Creo que en este Pasaje, Jesús quiere que demos prioridad a la Oración para que Él pueda guiarnos a caminar y abrir nuestros ojos al entendimiento de Su Evangelio para que se cumpla lo que dice el Versículo 22: ‘Y todo lo que pidiereis en oración, creyendo, lo recibiréis’. Amén!

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