Devocionales Diarios: Junio 1


Junio1 2020

En el capítulo 15 vemos una variedad de temas abordados por el autor. Una de las cosas que señala el autor se ve en el versículo 9: ” El Señor aborrece el camino de los malvados, pero ama a quienes siguen la justicia. “. La razón de esto se ve claramente en el versículo 11, que dice: “ Si ante el Señor están el sepulcro y la muerte, ¡cuánto más el corazón humano! “

Vemos en estos versículos que Dios está más interesado en la adoración de nuestros corazones que en nuestras acciones religiosas. Como sabemos por el profeta Isaías (véase Isaías 29:13), ¡es posible que hagamos todas las cosas correctas externamente mientras nuestros corazones están realmente lejos del Señor!

Para ponerlo en el contexto de hoy, ¡es posible que estemos súper involucrados en la iglesia, leamos nuestras biblias todos los días, oremos constantemente y aún tengamos corazones que están lejos de Dios! Dios no solo quiere nuestra obediencia en las acciones; obedecerlo en nuestros comportamientos es absolutamente esencial, pero si no lo obedecemos y nos acercamos a él desde el corazón, ¡entonces todo nuestro comportamiento religioso no tiene ningún valor!

Si adoramos a Dios en hipocresía, ya sea porque nuestras vidas no se alinean con Su Palabra o porque nuestros corazones están lejos de Él, nuestra adoración es en vano. ¡Debemos aprender a obedecerlo tanto en nuestras acciones como desde nuestros corazones!

Proverbios 15

15 La respuesta amable calma el enojo,
    pero la agresiva echa leña al fuego.

La lengua de los sabios destila conocimiento;[a]
    la boca de los necios escupe necedades.

Los ojos del Señor están en todo lugar,
    vigilando a los buenos y a los malos.

La lengua que brinda alivio[b] es árbol de vida;
    la lengua insidiosa deprime el espíritu.

El necio desdeña la corrección de su padre;
    el que la acepta demuestra prudencia.

En la casa del justo hay gran abundancia;
    en las ganancias del malvado, grandes problemas.

Los labios de los sabios esparcen conocimiento;
    el corazón de los necios ni piensa en ello.

El Señor aborrece las ofrendas de los malvados,
    pero se complace en la oración de los justos.

El Señor aborrece el camino de los malvados,
    pero ama a quienes siguen la justicia.

10 Para el descarriado, disciplina severa;
    para el que aborrece la corrección, la muerte.

11 Si ante el Señor están el sepulcro y la muerte,
    ¡cuánto más el corazón humano!

12 Al insolente no le gusta que lo corrijan,
    ni busca la compañía de los sabios.

13 El corazón alegre se refleja en el rostro,
    el corazón dolido deprime el espíritu.

14 El corazón entendido va tras el conocimiento;
    la boca de los necios se nutre de tonterías.

15 Para el afligido todos los días son malos;
    para el que es feliz todos son de fiesta.

16 Más vale tener poco, con temor del Señor,
    que muchas riquezas con grandes angustias.

17 Más vale comer verduras sazonadas con amor
    que un festín de carne[c] sazonada con odio.

18 El que es iracundo provoca contiendas;
    el que es paciente las apacigua.

19 El camino del perezoso está plagado de espinas,
    pero la senda del justo es como una calzada.

20 El hijo sabio alegra a su padre;
    el hijo necio menosprecia a su madre.

21 Al necio le divierte su falta de juicio;
    el entendido endereza sus propios pasos.

22 Cuando falta el consejo, fracasan los planes;
    cuando abunda el consejo, prosperan.

23 Es muy grato dar la respuesta adecuada,
    y más grato aún cuando es oportuna.

24 El sabio sube por el sendero de vida,
    para librarse de caer en el sepulcro.

25 El Señor derriba la casa de los soberbios,
    pero mantiene intactos los linderos de las viudas.

26 El Señor aborrece los planes de los malvados,
    pero se complace en las palabras puras.

27 El ambicioso acarrea mal sobre su familia;
    el que aborrece el soborno vivirá.

28 El corazón del justo medita sus respuestas,
    pero la boca del malvado rebosa de maldad.

29 El Señor se mantiene lejos de los impíos,
    pero escucha las oraciones de los justos.

30 Una mirada radiante alegra el corazón,
    y las buenas noticias renuevan las fuerzas.[d]

31 El que atiende a la crítica edificante
    habitará entre los sabios.

32 El que rechaza la corrección se desprecia a sí mismo;
    el que la atiende gana entendimiento.

33 El temor del Señor imparte sabiduría;
    la humildad precede a la honra.

Versión Reina-Valera 1960 © Sociedades Bíblicas en América Latina, 1960. Renovado © Sociedades Bíblicas Unidas, 1988.


Junio 1 2020

Devocionales Diarios: Mayo 31

Mayo 31 2020

Este capítulo en Proverbios aborda todo tipo de problemas, desde hablar lo que es verdadero (v.5) y ser cauteloso y perspicaz (v.16) hasta ser generoso con los pobres (v.21, 31) y lento para la ira (v .17, 29). En medio de estos diversos problemas que abordan los proverbios, vemos en el versículo 6 que “un burlador busca la sabiduría en vano, pero el conocimiento es fácil para un hombre de comprensión”.

Un tema recurrente en todos los Proverbios es un contraste entre el sabio y el necio, ¡y este versículo no es una excepción! Vemos aquí que aquellos que son “burladores”, tontos o insolentes en su pensamiento y en su forma de vivir serán incapaces de encontrar la sabiduría, incluso si lo intentan sinceramente; de hecho, el autor nos dice en el versículo 12 que “Hay un camino que le parece correcto a un hombre, pero su fin es el camino a la muerte” (énfasis mío). ¡Entonces el tonto que busca la sabiduría puede pensar que la ha encontrado, pero en verdad solo ha encontrado el camino a la muerte!

¡Aquellos que tienen comprensión, por otro lado, pueden encontrar sabiduría con facilidad! Lo que distingue a los dos es la postura de su corazón; aprendimos al comienzo de los Proverbios que “El temor de Jehová es el principio de la sabiduría” (Proverbios 1: 7). El “hombre de entendimiento” en el versículo 6 es aquel cuyo corazón es humilde, reverente, adorador y obediente a Dios en el temor a Él, mientras que el burlón no posee el temor al Señor.

Entonces, si bien el camino que parece correcto para el burlón termina en muerte, para el hombre comprensivo “¡El temor de Jehová es fuente de vida, para que uno pueda apartarse de las trampas de la muerte” (v.27)!

Vemos una vez más que, a medida que buscamos la sabiduría de Dios y buscamos vivir nuestras vidas de una manera que le den honor y gloria, debemos comenzar por poner nuestros corazones en la postura de temerle, de darle reverencia, respeto y adorar Su nombre. Si no lo hacemos, podemos estar yendo de una manera que nos parece correcta, pero su final es solo la muerte.

Proverbios 14

La mujer sabia edifica su casa;
Mas la necia con sus manos la derriba.

El que camina en su rectitud teme a Jehová;
Mas el de caminos pervertidos lo menosprecia.

En la boca del necio está la vara de la soberbia;
Mas los labios de los sabios los guardarán.

Sin bueyes el granero está vacío;
Mas por la fuerza del buey hay abundancia de pan.

El testigo verdadero no mentirá;
Mas el testigo falso hablará mentiras.

Busca el escarnecedor la sabiduría y no la halla;
Mas al hombre entendido la sabiduría le es fácil.

Vete de delante del hombre necio,
Porque en él no hallarás labios de ciencia.

La ciencia del prudente está en entender su camino;
Mas la indiscreción de los necios es engaño.

Los necios se mofan del pecado;
Mas entre los rectos hay buena voluntad.

10 El corazón conoce la amargura de su alma;
Y extraño no se entremeterá en su alegría.

11 La casa de los impíos será asolada;
Pero florecerá la tienda de los rectos.

12 Hay camino que al hombre le parece derecho;
Pero su fin es camino de muerte.

13 Aun en la risa tendrá dolor el corazón;
Y el término de la alegría es congoja.

14 De sus caminos será hastiado el necio de corazón;
Pero el hombre de bien estará contento del suyo.

15 El simple todo lo cree;
Mas el avisado mira bien sus pasos.

16 El sabio teme y se aparta del mal;
Mas el insensato se muestra insolente y confiado.

17 El que fácilmente se enoja hará locuras;
Y el hombre perverso será aborrecido.

18 Los simples heredarán necedad;
Mas los prudentes se coronarán de sabiduría.

19 Los malos se inclinarán delante de los buenos,
Y los impíos a las puertas del justo.

20 El pobre es odioso aun a su amigo;
Pero muchos son los que aman al rico.

21 Peca el que menosprecia a su prójimo;
Mas el que tiene misericordia de los pobres es bienaventurado.

22 ¿No yerran los que piensan el mal?
Misericordia y verdad alcanzarán los que piensan el bien.

23 En toda labor hay fruto;
Mas las vanas palabras de los labios empobrecen.

24 Las riquezas de los sabios son su corona;
Pero la insensatez de los necios es infatuación.

25 El testigo verdadero libra las almas;
Mas el engañoso hablará mentiras.

26 En el temor de Jehová está la fuerte confianza;
Y esperanza tendrán sus hijos.

27 El temor de Jehová es manantial de vida
Para apartarse de los lazos de la muerte.

28 En la multitud del pueblo está la gloria del rey;
Y en la falta de pueblo la debilidad del príncipe.

29 El que tarda en airarse es grande de entendimiento;
Mas el que es impaciente de espíritu enaltece la necedad.

30 El corazón apacible es vida de la carne;
Mas la envidia es carcoma de los huesos.

31 El que oprime al pobre afrenta a su Hacedor;
Mas el que tiene misericordia del pobre, lo honra.

32 Por su maldad será lanzado el impío;
Mas el justo en su muerte tiene esperanza.

33 En el corazón del prudente reposa la sabiduría;
Pero no es conocida en medio de los necios.

34 La justicia engrandece a la nación;
Mas el pecado es afrenta de las naciones.

35 La benevolencia del rey es para con el servidor entendido;
Mas su enojo contra el que lo avergüenza.

Versión Reina-Valera 1960 © Sociedades Bíblicas en América Latina, 1960. Renovado © Sociedades Bíblicas Unidas, 1988.

¿Cómo podemos evaluar si el camino que estamos tomando en la vida es el camino del Señor o solo lo que nos parece correcto?

¿Por qué el temor de Jehová es tan esencial para el resto de la sabiduría? ¿Por qué debe ser el punto de partida en nuestra búsqueda de sabiduría?

Pregunta de discusión familiar:

¿Qué significa para nosotros temer al Señor? ¿Cómo temer correctamente al Señor nos pone en el camino correcto en la vida?

Mayo 31 2020

Devocionales Diarios: Mayo 30

Mayo 30 2020

El libro de Proverbios es una colección de dichos cortos en el Antiguo Testamento destinados a infundir sabiduría en el pueblo de Dios. ¡Profundicemos juntos en la Palabra y permitamos que el Señor moldee nuestros corazones, nuestras mentes y nuestras vidas en Su sabiduría!

Al leer este capítulo, casi puedes imaginar a Salomón transmitiendo su “sabiduría” a sus hijos en la casa. El versículo 20, es fuerte y claro. Tal vez incluso puedas escuchar a tu mamá o tu papá.

La primera parte de este versículo menciona caminar con personas sabias. El que anda con sabios, sabio será.  Cuando elegimos asociarnos, caminar, hacer amistad con hombres y mujeres sabios, añadimos sabiduría a nuestra vida.

La segunda frase contrasta con la primera. “El que con necios se junta, saldrá mal parado” Se da por sentado que el compañero de los necios es un necio y que permanecerá enraizado en su locura. Su elección de compañeros demuestra su locura y muestra su destino: destrucción.

Es un principio de vida, las personas más cercanas a nosotros son las personas que más nos impactan. Pablo lo mencionó años después en 1 Cor. 15:33 ” No se dejen engañar: «Las malas compañías corrompen las buenas costumbres”. ¡Elige a tus amigos sabiamente y sé un buen amigo!

Proverbios 13

13 El hijo sabio recibe el consejo del padre;
Mas el burlador no escucha las reprensiones.

Del fruto de su boca el hombre comerá el bien;
Mas el alma de los prevaricadores hallará el mal.

El que guarda su boca guarda su alma;
Mas el que mucho abre sus labios tendrá calamidad.

El alma del perezoso desea, y nada alcanza;
Mas el alma de los diligentes será prosperada.

El justo aborrece la palabra de mentira;
Mas el impío se hace odioso e infame.

La justicia guarda al de perfecto camino;
Mas la impiedad trastornará al pecador.

Hay quienes pretenden ser ricos, y no tienen nada;
Y hay quienes pretenden ser pobres, y tienen muchas riquezas.

El rescate de la vida del hombre está en sus riquezas;
Pero el pobre no oye censuras.

La luz de los justos se alegrará;
Mas se apagará la lámpara de los impíos.

10 Ciertamente la soberbia concebirá contienda;
Mas con los avisados está la sabiduría.

11 Las riquezas de vanidad disminuirán;
Pero el que recoge con mano laboriosa las aumenta.

12 La esperanza que se demora es tormento del corazón;
Pero árbol de vida es el deseo cumplido.

13 El que menosprecia el precepto perecerá por ello;
Mas el que teme el mandamiento será recompensado.

14 La ley del sabio es manantial de vida
Para apartarse de los lazos de la muerte.

15 El buen entendimiento da gracia;
Mas el camino de los transgresores es duro.

16 Todo hombre prudente procede con sabiduría;
Mas el necio manifestará necedad.

17 El mal mensajero acarrea desgracia;
Mas el mensajero fiel acarrea salud.

18 Pobreza y vergüenza tendrá el que menosprecia el consejo;
Mas el que guarda la corrección recibirá honra.

19 El deseo cumplido regocija el alma;
Pero apartarse del mal es abominación a los necios.

20 El que anda con sabios, sabio será;
Mas el que se junta con necios será quebrantado.

21 El mal perseguirá a los pecadores,
Mas los justos serán premiados con el bien.

22 El bueno dejará herederos a los hijos de sus hijos;
Pero la riqueza del pecador está guardada para el justo.

23 En el barbecho de los pobres hay mucho pan;
Mas se pierde por falta de juicio.

24 El que detiene el castigo, a su hijo aborrece;
Mas el que lo ama, desde temprano lo corrige.

25 El justo come hasta saciar su alma;
Mas el vientre de los impíos tendrá necesidad.

Versión Reina-Valera 1960 © Sociedades Bíblicas en América Latina, 1960. Renovado © Sociedades Bíblicas Unidas, 1988.

Pregunta de discusión familiar:

• ¿Por qué es tan importante ser sabio y discernir sobre las personas que nos rodean? ¿Cómo podemos rodearnos de amigos que nos acerquen a Jesús, y cómo podemos ser amigos que guíen a otros a estar más cerca de Jesús?

Mayo 30 2020

Devocionales Diarios: Mayo 29

Mayo 29 2020

El libro de Proverbios es una colección de dichos cortos en el Antiguo Testamento destinados a infundir sabiduría en el pueblo de Dios. Es importante recordar mientras leemos que un proverbio es una declaración que generalmente es verdadera en principio, no una promesa universalmente verdadera. ¡Profundicemos juntos en la Palabra y permitamos que el Señor moldee nuestros corazones, nuestras mentes y nuestras vidas en Su sabiduría!

Observe cómo el autor destaca la sabiduría vivificante en el uso de nuestra boca, labios o palabras. Por lo general, en la estructura de un verso individual el escritor enfatiza un impacto positivo y uno negativo. Sin embargo, en el versículo 14, observe el desarrollo de una idea y el impacto positivo a futuro.

Este versículo es un gran recordatorio de por qué debemos decir la verdad y cómo la verdad, cuando se habla, se vuelve cada vez más fructífera. Cuando la verdad y la integridad son consistentes, estas conducen a la confianza y confiabilidad con Dios y las personas.

Las palabras del justo bendicen a los demás y también impactan su propia vida. El escritor menciona que “El Señor aborrece a los de labios mentirosos, pero se complace en los que actúan con lealtad” y siempre está activo para bendecirlos.

Proverbios 12

12 El que ama la instrucción ama la sabiduría;
Mas el que aborrece la reprensión es ignorante.

El bueno alcanzará favor de Jehová;
Mas él condenará al hombre de malos pensamientos.

El hombre no se afirmará por medio de la impiedad;
Mas la raíz de los justos no será removida.

La mujer virtuosa es corona de su marido;
Mas la mala, como carcoma en sus huesos.

Los pensamientos de los justos son rectitud;
Mas los consejos de los impíos, engaño.

Las palabras de los impíos son asechanzas para derramar sangre;
Mas la boca de los rectos los librará.

Dios trastornará a los impíos, y no serán más;
Pero la casa de los justos permanecerá firme.

Según su sabiduría es alabado el hombre;
Mas el perverso de corazón será menospreciado.

Más vale el despreciado que tiene servidores,
Que el que se jacta, y carece de pan.

10 El justo cuida de la vida de su bestia;
Mas el corazón de los impíos es cruel.

11 El que labra su tierra se saciará de pan;
Mas el que sigue a los vagabundos es falto de entendimiento.

12 Codicia el impío la red de los malvados;
Mas la raíz de los justos dará fruto.

13 El impío es enredado en la prevaricación de sus labios;
Mas el justo saldrá de la tribulación.

14 El hombre será saciado de bien del fruto de su boca;
Y le será pagado según la obra de sus manos.

15 El camino del necio es derecho en su opinión;
Mas el que obedece al consejo es sabio.

16 El necio al punto da a conocer su ira;
Mas el que no hace caso de la injuria es prudente.

17 El que habla verdad declara justicia;
Mas el testigo mentiroso, engaño.

18 Hay hombres cuyas palabras son como golpes de espada;
Mas la lengua de los sabios es medicina.

19 El labio veraz permanecerá para siempre;
Mas la lengua mentirosa sólo por un momento.

20 Engaño hay en el corazón de los que piensan el mal;
Pero alegría en el de los que piensan el bien.

21 Ninguna adversidad acontecerá al justo;
Mas los impíos serán colmados de males.

22 Los labios mentirosos son abominación a Jehová;
Pero los que hacen verdad son su contentamiento.

23 El hombre cuerdo encubre su saber;
Mas el corazón de los necios publica la necedad.

24 La mano de los diligentes señoreará;
Mas la negligencia será tributaria.

25 La congoja en el corazón del hombre lo abate;
Mas la buena palabra lo alegra.

26 El justo sirve de guía a su prójimo;
Mas el camino de los impíos les hace errar.

27 El indolente ni aun asará lo que ha cazado;
Pero haber precioso del hombre es la diligencia.

28 En el camino de la justicia está la vida;
Y en sus caminos no hay muerte.

Versión Reina-Valera 1960 © Sociedades Bíblicas en América Latina, 1960. Renovado © Sociedades Bíblicas Unidas, 1988.

Pregunta de discusión familiar:

• ¿Cómo afecta la forma en que usamos nuestras palabras el curso de nuestras vidas? ¿Por qué las palabras son tan poderosas para construir o destruir, y cómo podemos asegurarnos de que las estamos usando de una manera que honren al Señor?

Mayo 29 2020

Devocionales Diarios: Mayo 28

Mayo 28 2020

El libro de Proverbios es una colección de dichos cortos en el Antiguo Testamento destinados a infundir sabiduría en el pueblo de Dios. Es importante recordar mientras leemos que un proverbio es una declaración que generalmente es verdadera en principio, no una promesa universalmente verdadera. ¡Profundicemos juntos en la Palabra y permitamos que el Señor moldee nuestros corazones, nuestras mentes y nuestras vidas en Su sabiduría durante el próximo mes!

La sabiduría incluye habilidades para vivir y una relación íntima continua con Dios. Debemos tener cuidado al leer algunos de estos proverbios a nivel superficial porque uno podría asumir que la sabiduría y la justicia están vinculadas a la recompensa terrenal. Como descubrimos rápidamente, a las buenas personas les pasan cosas malas.

Los proverbios contienen muchos contrastes entre los justos y los malvados, los sabios y los necios. En este capítulo, tenga en cuenta específicamente: seguridad – caída, vivir – morir, bendiciones – maldiciones, y más.

El autor destaca muchos beneficios de elegir la justicia que los seguidores de Jesús deben perseguir diariamente. Algunos son obvios y algunos otros requieren ser meditarlos un poco más. A medida que lea el capítulo, resalte uno o dos versículos y luego regrese y medite en ellos. Repítalo en voz alta varias veces, léalo en otra traducción. Además, ore a través de ese versículo para llevarlo a su corazón y mente durante el día.

Proverbios 11

11 El peso falso es abominación a Jehová;
Mas la pesa cabal le agrada.

Cuando viene la soberbia, viene también la deshonra;
Mas con los humildes está la sabiduría.

La integridad de los rectos los encaminará;
Pero destruirá a los pecadores la perversidad de ellos.

No aprovecharán las riquezas en el día de la ira;
Mas la justicia librará de muerte.

La justicia del perfecto enderezará su camino;
Mas el impío por su impiedad caerá.

La justicia de los rectos los librará;
Mas los pecadores serán atrapados en su pecado.

Cuando muere el hombre impío, perece su esperanza;
Y la expectación de los malos perecerá.

El justo es librado de la tribulación;
Mas el impío entra en lugar suyo.

El hipócrita con la boca daña a su prójimo;
Mas los justos son librados con la sabiduría.

10 En el bien de los justos la ciudad se alegra;
Mas cuando los impíos perecen hay fiesta.

11 Por la bendición de los rectos la ciudad será engrandecida;
Mas por la boca de los impíos será trastornada.

12 El que carece de entendimiento menosprecia a su prójimo;
Mas el hombre prudente calla.

13 El que anda en chismes descubre el secreto;
Mas el de espíritu fiel lo guarda todo.

14 Donde no hay dirección sabia, caerá el pueblo;
Mas en la multitud de consejeros hay seguridad.

15 Con ansiedad será afligido el que sale por fiador de un extraño;
Mas el que aborreciere las fianzas vivirá seguro.

16 La mujer agraciada tendrá honra,
Y los fuertes tendrán riquezas.

17 A su alma hace bien el hombre misericordioso;
Mas el cruel se atormenta a sí mismo.

18 El impío hace obra falsa;
Mas el que siembra justicia tendrá galardón firme.

19 Como la justicia conduce a la vida,
Así el que sigue el mal lo hace para su muerte.

20 Abominación son a Jehová los perversos de corazón;
Mas los perfectos de camino le son agradables.

21 Tarde o temprano, el malo será castigado;
Mas la descendencia de los justos será librada.

22 Como zarcillo de oro en el hocico de un cerdo
Es la mujer hermosa y apartada de razón.

23 El deseo de los justos es solamente el bien;
Mas la esperanza de los impíos es el enojo.

24 Hay quienes reparten, y les es añadido más;
Y hay quienes retienen más de lo que es justo, pero vienen a pobreza.

25 El alma generosa será prosperada;
Y el que saciare, él también será saciado.

26 Al que acapara el grano, el pueblo lo maldecirá;
Pero bendición será sobre la cabeza del que lo vende.

27 El que procura el bien buscará favor;
Mas al que busca el mal, éste le vendrá.

28 El que confía en sus riquezas caerá;
Mas los justos reverdecerán como ramas.

29 El que turba su casa heredará viento;
Y el necio será siervo del sabio de corazón.

30 El fruto del justo es árbol de vida;
Y el que gana almas es sabio.

31 Ciertamente el justo será recompensado en la tierra;
!!Cuánto más el impío y el pecador!

Versión Reina-Valera 1960 © Sociedades Bíblicas en América Latina, 1960. Renovado © Sociedades Bíblicas Unidas, 1988.

Pregunta de discusión familiar:

• ¿Por qué es importante para nosotros recordar que vivir con sabiduría no es una garantía de prosperidad terrenal? ¿Qué sucede cuando vinculamos el vivir conforme al Señor con la bendición material y luego no recibimos esa bendición material que esperábamos?

Mayo 28 2020

Devocionales Diarios: Mayo 27

Mayo 27 2020

El libro de Proverbios es una colección de dichos cortos en el Antiguo Testamento destinados a infundir sabiduría en el pueblo de Dios. Es importante recordar mientras leemos que un proverbio es una declaración que generalmente es verdadera en principio, no una promesa universalmente verdadera. ¡Profundicemos juntos en la Palabra y permitamos que el Señor moldee nuestros corazones, nuestras mentes y nuestras vidas en Su sabiduría durante el próximo mes!

En la primera parte de Proverbios 10, se nos dan instrucciones sabias sobre las cosas que debemos evitar, y también sobre las cosas que más importan. La clave para vivir una vida sin arrepentimiento, una vida agradable al Señor, es la integridad. La integridad a menudo se ha definido como “hacer siempre lo correcto, incluso cuando nadie está mirando”. Por supuesto, sabemos que Dios siempre está mirando, y queremos honrarlo. Aquí en Proverbios se nos recuerda que cuando vivimos una vida de honestidad e integridad, podemos ” caminar seguros” (v.9), sabiendo que Él está con nosotros.

Vivir una vida de integridad no se trata solo de nuestras acciones, sino también de nuestras palabras. Las palabras son poderosas. Pueden levantar a otros, dar esperanza, dar consuelo y paz. O pueden destruir a otros, causando gran dolor y desesperación. En esta parte de Proverbios 10, el escritor contrasta la “boca del necio” (v.14) con la “boca del justo” (v.11), y nos recuerda que controlar nuestra lengua es vital para nuestra vida y nuestras relaciones.

Finalmente, en la última parte del capítulo, se nos da una lista de bendiciones que se dan a los “justos”. Cuando vivimos una vida de integridad, observando lo que decimos y hacemos, honrando a Dios con nuestras acciones y nuestras palabras, entonces ” lo que el justo desea, eso recibe” (v.24). ¡Qué recordatorio tan asombroso, que Él quiere lo mejor para nosotros! Él solo pide que lo sigamos de todo corazón, viviendo una vida de honestidad, integridad y amor.

Proverbios 10

Contraste entre el justo y el malvado

10 Los proverbios de Salomón.
    El hijo sabio alegra al padre,
    Pero el hijo necio es tristeza de su madre.

Los tesoros de maldad no serán de provecho;
Mas la justicia libra de muerte.

Jehová no dejará padecer hambre al justo;
Mas la iniquidad lanzará a los impíos.

La mano negligente empobrece;
Mas la mano de los diligentes enriquece.

El que recoge en el verano es hombre entendido;
El que duerme en el tiempo de la siega es hijo que avergüenza.

Hay bendiciones sobre la cabeza del justo;
Pero violencia cubrirá la boca de los impíos.

La memoria del justo será bendita;
Mas el nombre de los impíos se pudrirá.

El sabio de corazón recibirá los mandamientos;
Mas el necio de labios caerá.

El que camina en integridad anda confiado;
Mas el que pervierte sus caminos será quebrantado.

10 El que guiña el ojo acarrea tristeza;
Y el necio de labios será castigado.

11 Manantial de vida es la boca del justo;
Pero violencia cubrirá la boca de los impíos.

12 El odio despierta rencillas;
Pero el amor cubrirá todas las faltas.

13 En los labios del prudente se halla sabiduría;
Mas la vara es para las espaldas del falto de cordura.

14 Los sabios guardan la sabiduría;
Mas la boca del necio es calamidad cercana.

15 Las riquezas del rico son su ciudad fortificada;
Y el desmayo de los pobres es su pobreza.

16 La obra del justo es para vida;
Mas el fruto del impío es para pecado.

17 Camino a la vida es guardar la instrucción;
Pero quien desecha la reprensión, yerra.

18 El que encubre el odio es de labios mentirosos;
Y el que propaga calumnia es necio.

19 En las muchas palabras no falta pecado;
Mas el que refrena sus labios es prudente.

20 Plata escogida es la lengua del justo;
Mas el corazón de los impíos es como nada.

21 Los labios del justo apacientan a muchos,
Mas los necios mueren por falta de entendimiento.

22 La bendición de Jehová es la que enriquece,
Y no añade tristeza con ella.

23 El hacer maldad es como una diversión al insensato;
Mas la sabiduría recrea al hombre de entendimiento.

24 Lo que el impío teme, eso le vendrá;
Pero a los justos les será dado lo que desean.

25 Como pasa el torbellino, así el malo no permanece;
Mas el justo permanece para siempre.

26 Como el vinagre a los dientes, y como el humo a los ojos,
Así es el perezoso a los que lo envían.

27 El temor de Jehová aumentará los días;
Mas los años de los impíos serán acortados.

28 La esperanza de los justos es alegría;
Mas la esperanza de los impíos perecerá.

29 El camino de Jehová es fortaleza al perfecto;
Pero es destrucción a los que hacen maldad.

30 El justo no será removido jamás;
Pero los impíos no habitarán la tierra.

31 La boca del justo producirá sabiduría;
Mas la lengua perversa será cortada.

32 Los labios del justo saben hablar lo que agrada;
Mas la boca de los impíos habla perversidades.

Versión Reina-Valera 1960 © Sociedades Bíblicas en América Latina, 1960. Renovado © Sociedades Bíblicas Unidas, 1988.

Pregunta de discusión familiar:

• ¿Qué significa la palabra “integridad” para usted? ¿Cómo vivir una vida de integridad trae gloria y honor a Jesús?

Mayo 27 2020

Devocionales Diarios: Mayo 26

Mayo 26 2020

El libro de Proverbios es una colección de dichos cortos en el Antiguo Testamento destinados a infundir sabiduría en el pueblo de Dios. Es importante recordar mientras leemos que un proverbio es una declaración que generalmente es verdadera en principio, no una promesa universalmente verdadera. ¡Profundicemos juntos en la Palabra y permitamos que el Señor moldee nuestros corazones, nuestras mentes y nuestras vidas en Su sabiduría durante el próximo mes!

El capítulo 9 de Proverbios es una comparación interesante entre el camino de la sabiduría (v.1-6) y el camino de la locura (v.13-18). Es interesante leer estos dos conjuntos de versos y comparar. Pero lo que quizás sea más significativo en este breve capítulo de Proverbios son los versículos intermedios, que hablan de instrucción y reproche, así como las formas en que respondemos a ellos.

El versículo 9 dice: “Instruye al sabio, y se hará más sabio; enseña al justo, y aumentará su saber “. A veces es difícil tomar críticas constructivas. Nuestra naturaleza humana, nuestra naturaleza pecaminosa, nos dice que debemos estar orgullosos de las cosas y sentir que hemos hecho lo mejor. Cuando alguien ofrece consejo o instrucción, a menudo podemos verlo como una crítica y ponernos a la defensiva. ¡Pero la biblia dice claramente que escuchar las instrucciones es sabio y que enseñar es el camino de los justos!

El camino sabio es buscar aprender de la crítica o la instrucción, por difícil que sea.

Todo esto comienza con un temor al Señor … un temor saludable, sabiendo que Él es Dios Todopoderoso y capaz de hacer todas las cosas. En el versículo 10, dice ” El comienzo de la sabiduría es el temor del Señor; conocer al Santo es tener discernimiento”.

Proverbios 9

Invitación de la sabiduría y de la necedad

La sabiduría construyó su casa
    y labró sus siete pilares.
Preparó un banquete, mezcló su vino
    y tendió la mesa.
Envió a sus doncellas, y ahora clama
    desde lo más alto de la ciudad.
«¡Vengan conmigo los inexpertos!
    —dice a los faltos de juicio—.
Vengan, disfruten de mi pan
    y beban del vino que he mezclado.
Dejen su insensatez, y vivirán;
    andarán por el camino del discernimiento.

»El que corrige al burlón se gana que lo insulten;
    el que reprende al malvado se gana su desprecio.
No reprendas al insolente, no sea que acabe por odiarte;
    reprende al sabio, y te amará.
Instruye al sabio, y se hará más sabio;
    enseña al justo, y aumentará su saber.

10 »El comienzo de la sabiduría es el temor del Señor;
    conocer al Santo[a] es tener discernimiento.
11 Por mí aumentarán tus días;
    muchos años de vida te serán añadidos.
12 Si eres sabio, tu premio será tu sabiduría;
    si eres insolente, solo tú lo sufrirás».

13 La mujer necia es escandalosa,
    frívola y desvergonzada.
14 Se sienta a las puertas de su casa,
    sienta sus reales en lo más alto de la ciudad,
15 y llama a los que van por el camino,
    a los que no se apartan de su senda.
16 «¡Vengan conmigo, inexpertos!
    —dice a los faltos de juicio—.
17 ¡Las aguas robadas saben a gloria!
    ¡El pan sabe a miel si se come a escondidas!»
18 Pero estos ignoran que allí está la muerte,
    que sus invitados caen al fondo de la fosa.

Versión Reina-Valera 1960 © Sociedades Bíblicas en América Latina, 1960. Renovado © Sociedades Bíblicas Unidas, 1988.

El temor del Señor es el comienzo de la sabiduría. Es donde todo empieza. Teme al Señor y humildemente búscalo, y tendrás conocimiento y visión; y con eso, la capacidad de ver la instrucción como un sabio consejo, no solo una crítica.

Pregunta de discusión familiar:

¿Por qué es tan difícil para nosotros tomar consejos amorosos, instrucciones o incluso críticas? ¿Por qué es tan importante que dejemos de lado nuestro orgullo y tengamos una actitud humilde mientras buscamos adquirir sabiduría?

Mayo 26 2020

Devocionales Diarios: Mayo 25

Mayo 25 2020

El libro de Proverbios es una colección de dichos cortos en el Antiguo Testamento destinados a infundir sabiduría en el pueblo de Dios. Es importante recordar mientras leemos que un proverbio es una declaración que generalmente es verdadera en principio, no una promesa universalmente verdadera. ¡Profundicemos juntos en la Palabra y permitamos que el Señor moldee nuestros corazones, nuestras mentes y nuestras vidas en Su sabiduría durante el próximo mes!

El capítulo 8 de Proverbios comienza con la personificación de la sabiduría, un marcado contraste con la adúltera del capítulo 7. El escritor del proverbio muestra que vivir sabiamente es vivir bien y buscar la sabiduría de Dios en lugar de las cosas de este mundo.

En los versículos 10-11, el escritor dice: ” Opten por mi instrucción, no por la plata; por el conocimiento, no por el oro refinado. Vale más la sabiduría que las piedras preciosas, y ni lo más deseable se le compara.” Finalmente, la sabiduría se encuentra en Cristo Jesús, y nunca en las cosas que este mundo tiene para ofrecer.

En la siguiente parte de Proverbios 8, habla del “temor al Señor” (v.13) y del “consejo y el buen juicio” (v.14). En última instancia, la sabiduría dice: ” A los que me aman, les correspondo; a los que me buscan, me doy a conocer” (v.17) El conocimiento es horizontal, pero la sabiduría es vertical … ¡proviene solo del Señor! Necesitamos buscarlo y amarlo con todo nuestro corazón, y él nos guiará.

Los versículos 22-31 hablan de cómo la sabiduría ha estado allí desde el principio, con Dios, y cómo Dios formó la tierra y estableció los cielos, pero lo más importante, cómo somos Su deleite. ¡Qué imagen tan maravillosa de nuestro Padre Celestial … el conocimiento de que el Dios de todas las cosas se deleita en nosotros, nos ama y quiere impartirnos Su sabiduría!

El capítulo termina con el escritor recordándonos las bendiciones que vienen cuando buscamos la sabiduría de Dios diariamente. En el versículo 34, dice ” Dichosos los que me escuchan y a mis puertas están atentos cada día, esperando a la entrada de mi casa”. ¡Debemos aprender a esperar en Dios, y eso es un proceso! ¡Pero podríamos perdernos si tenemos demasiada prisa, y las bendiciones que vienen junto con la sabiduría que Dios da siempre valen la pena la espera!

Proverbios 8

Llamado de la sabiduría

¿Acaso no está llamando la sabiduría?
    ¿No está elevando su voz la inteligencia?
Toma su puesto en las alturas,
    a la vera del camino y en las encrucijadas.
Junto a las puertas que dan a la ciudad,
    a la entrada misma, grita a voz en cuello:
«A ustedes los hombres, los estoy llamando;
    dirijo mi voz a toda la humanidad.
Ustedes los inexpertos, ¡adquieran prudencia!
    Ustedes los necios, ¡obtengan discernimiento!
Escúchenme, que diré cosas importantes;
    mis labios hablarán lo correcto.
Mi boca expresará la verdad,
    pues mis labios detestan la mentira.
Las palabras de mi boca son todas justas;
    no hay en ellas maldad ni doblez.
Son claras para los entendidos,
    e irreprochables para los sabios.
10 Opten por mi instrucción, no por la plata;
    por el conocimiento, no por el oro refinado.
11 Vale más la sabiduría que las piedras preciosas,
    y ni lo más deseable se le compara.

12 »Yo, la sabiduría, convivo con la prudencia
    y poseo conocimiento y discreción.
13 Quien teme al Señor aborrece lo malo;
    yo aborrezco el orgullo y la arrogancia,
    la mala conducta y el lenguaje perverso.
14 Míos son el consejo y el buen juicio;
    míos son el entendimiento y el poder.
15 Por mí reinan los reyes
    y promulgan leyes justas los gobernantes.
16 Por mí gobiernan los príncipes
    y todos los nobles que rigen la tierra.[a]
17 A los que me aman, les correspondo;
    a los que me buscan, me doy a conocer.
18 Conmigo están las riquezas y la honra,
    la prosperidad[b] y los bienes duraderos.
19 Mi fruto es mejor que el oro fino;
    mi cosecha sobrepasa a la plata refinada.
20 Voy por el camino de la rectitud,
    por los senderos de la justicia,
21 enriqueciendo a los que me aman
    y acrecentando sus tesoros.

22 »El Señor me dio la vida[c] como primicia de sus obras,[d]
    mucho antes de sus obras de antaño.
23 Fui establecida desde la eternidad,
    desde antes que existiera el mundo.
24 No existían los grandes mares cuando yo nací;
    no había entonces manantiales de abundantes aguas.
25 Nací antes que fueran formadas las colinas,
    antes que se cimentaran las montañas,
26 antes que él creara la tierra y sus paisajes
    y el polvo primordial con que hizo el mundo.
27 Cuando Dios cimentó la bóveda celeste
    y trazó el horizonte sobre las aguas,
    allí estaba yo presente.
28 Cuando estableció las nubes en los cielos
    y reforzó las fuentes del mar profundo;
29 cuando señaló los límites del mar,
    para que las aguas obedecieran su mandato;
cuando plantó los fundamentos de la tierra,
30     allí estaba yo, afirmando su obra.
Día tras día me llenaba yo de alegría,
    siempre disfrutaba de estar en su presencia;
31 me regocijaba en el mundo que él creó;
    ¡en el género humano me deleitaba!

32 »Y ahora, hijos míos, escúchenme:
    dichosos los que van por[e] mis caminos.
33 Atiendan a mi instrucción, y sean sabios;
    no la descuiden.
34 Dichosos los que me escuchan
    y a mis puertas están atentos cada día,
    esperando a la entrada de mi casa.
35 En verdad, quien me encuentra halla la vida
    y recibe el favor del Señor.
36 Quien me rechaza se perjudica a sí mismo;
    quien me aborrece, ama la muerte».

Versión Reina-Valera 1960 © Sociedades Bíblicas en América Latina, 1960. Renovado © Sociedades Bíblicas Unidas, 1988.

Como dice en el versículo 35, ” quien me encuentra halla la vida”, ¡una promesa que vemos cumplida en el Nuevo Testamento, en la persona de Jesucristo!

Pregunta de discusión familiar:

¿Por qué crees que el autor nos dice que la sabiduría es mejor que las riquezas terrenales, como las joyas o el dinero? ¿Qué hace a la sabiduría mejor que las cosas de este mundo?

Mayo 25 2020

Devocionales Diarios: Mayo 24

Mayo 24 2020

El libro de Proverbios es una colección de dichos cortos en el Antiguo Testamento destinados a infundir sabiduría en el pueblo de Dios. Es importante recordar mientras leemos que un proverbio es una declaración que generalmente es verdadera en principio, no una promesa universalmente verdadera. ¡Profundicemos juntos en la Palabra y permitamos que el Señor moldee nuestros corazones, nuestras mentes y nuestras vidas en Su sabiduría durante el próximo mes!

En el capítulo 4 de Proverbios, el autor continúa dando instrucciones a sus hijos en el camino de la sabiduría. Alienta a su hijo a que busque diligentemente la sabiduría y la abrace, que siga el camino de la sabiduría en lugar del camino de los impíos, que se aparte de los malos caminos y permanezca en el camino de la vida.

En medio de esta instrucción paternal está este mandato: ” Por sobre todas las cosas cuida tu corazón, porque de él mana la vida” (Proverbios 4:23). El resto de las instrucciones que Salomón da a partir de entonces dependen de que se guarde el corazón; ¡la idea que está tratando de transmitir es que las influencias que permitimos en nuestros corazones terminarán determinando el curso de nuestras vidas!

Mantener una estrecha vigilancia en el corazón es un aspecto integral de la vida sabia, porque sin él, inevitablemente, terminaremos donde nunca pretendíamos estar. Si no mantenemos nuestros corazones bajo vigilancia, y permitimos que las cosas mundanas o malvadas entren sin pensarlo dos veces, no deberíamos sorprendernos cuando nuestros pies terminen vagando por donde nuestros corazones ya se han ido.

Proverbios 4

Beneficios de la sabiduría

Oíd, hijos, la enseñanza de un padre,
    Y estad atentos, para que conozcáis cordura.

Porque os doy buena enseñanza;
No desamparéis mi ley.

Porque yo también fui hijo de mi padre,
Delicado y único delante de mi madre.

Y él me enseñaba, y me decía:
Retenga tu corazón mis razones,
Guarda mis mandamientos, y vivirás.

Adquiere sabiduría, adquiere inteligencia;
No te olvides ni te apartes de las razones de mi boca;

No la dejes, y ella te guardará;
Amala, y te conservará.

Sabiduría ante todo; adquiere sabiduría;
Y sobre todas tus posesiones adquiere inteligencia.

Engrandécela, y ella te engrandecerá;
Ella te honrará, cuando tú la hayas abrazado.

Adorno de gracia dará a tu cabeza;
Corona de hermosura te entregará.

10 Oye, hijo mío, y recibe mis razones,
Y se te multiplicarán años de vida.

11 Por el camino de la sabiduría te he encaminado,
Y por veredas derechas te he hecho andar.

12 Cuando anduvieres, no se estrecharán tus pasos,
Y si corrieres, no tropezarás.

13 Retén el consejo, no lo dejes;
Guárdalo, porque eso es tu vida.

14 No entres por la vereda de los impíos,
Ni vayas por el camino de los malos.

15 Déjala, no pases por ella;
Apártate de ella, pasa.

16 Porque no duermen ellos si no han hecho mal,
Y pierden el sueño si no han hecho caer a alguno.

17 Porque comen pan de maldad, y beben vino de robos;

18 Mas la senda de los justos es como la luz de la aurora,
Que va en aumento hasta que el día es perfecto.

19 El camino de los impíos es como la oscuridad;
No saben en qué tropiezan.

20 Hijo mío, está atento a mis palabras;
Inclina tu oído a mis razones.

21 No se aparten de tus ojos;
Guárdalas en medio de tu corazón;

22 Porque son vida a los que las hallan,
Y medicina a todo su cuerpo.

23 Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón;
Porque de él mana la vida.

24 Aparta de ti la perversidad de la boca,
Y aleja de ti la iniquidad de los labios.

25 Tus ojos miren lo recto,
Y diríjanse tus párpados hacia lo que tienes delante.

26 Examina la senda de tus pies,
Y todos tus caminos sean rectos.

27 No te desvíes a la derecha ni a la izquierda;
Aparta tu pie del mal.

Versión Reina-Valera 1960 © Sociedades Bíblicas en América Latina, 1960. Renovado © Sociedades Bíblicas Unidas, 1988.

¿De qué maneras nos sentimos tentados a bajar la guardia sobre nuestros corazones y a seguir las voces del mundo? ¿De qué maneras podemos asegurarnos de proteger nuestros corazones con una vigilancia renovada?

Pregunta de discusión familiar:

¿Por qué es tan importante asegurarse de que las cosas que consumimos (TV / películas, juegos, libros, música, etc.) honren a Dios? ¿Cómo dice este pasaje que todo eso nos afecta?

Mayo 24 2020

Navegando Mi Nueva Realidad: día 5

Mayo 19 2020

Estos dos capítulos del libro de Nehemías pueden parecer una gran lista de nombres, lugares y leyes que hoy no tienen mucha relevancia para nosotros. Sin embargo, si profundizamos un poco más para ver lo que el autor del libro está tratando de comunicar, vemos que en realidad están sucediendo muchas cosas en estos capítulos y podemos tener una mejor idea de cómo se aplica a nosotros en nuestro contexto.

En el capítulo 10 vemos una lista de personas que sellaron el pacto al que se hizo referencia al final del capítulo 9. En el capítulo 9, las personas confesaron sus pecados a Dios y ahora se están comprometiendo a obedecerle y a guardar el pacto hecho con Él en el monte Sinaí. La lista de quienes firmaron y sellaron esta renovación del pacto incluye a personas de todos los ámbitos de la vida en la comunidad de Israel. La intención era demostrar que toda la comunidad se comprometía a ser diligente en guardar los mandamientos de Dios y caminar en sus caminos.

En el Capítulo 11 vemos que el pueblo de Israel da un “diezmo” para ir a vivir a Jerusalén y el autor relata sus nombres y familias, así como las otras aldeas que rodearon a Jerusalén. Si tuviéramos que mirar en un mapa y ver el área de tierra que cubren estas aldeas, realmente no se compara mucho con lo grande que era la nación de Israel antes del exilio.

Todo esto está relacionado con el mensaje general del libro de Nehemías. Nehemías viene con celo y devoción para reconstruir los muros de Jerusalén y guiar al pueblo a honrar al Señor. Los exiliados que habían regresado a Israel de varias tierras creían que ellos eran el “remanente” mencionado por los profetas, y que la gran restauración prometida por los profetas estaba llegando a ellos.

Sin embargo, vemos a cada paso en la historia de Nehemías, incluso en sus mayores éxitos, hay un toque de decepción. A pesar de que los muros están reconstruidos y la gente se ha comprometido a obedecer la Ley de Dios, Jerusalén es un pueblo fantasma, y ​​la gente tiene que ser elegida por sorteo para decidir quién irá a vivir allí; en otras palabras, la gente no está haciendo fila voluntariamente para ir a vivir a la ciudad santa. Fuera de Jerusalén, la tierra de Israel es solo una fracción de su tamaño original, y todo lo que produce la tierra no beneficia al pueblo sino a un rey extranjero que gobierna sobre ellos (Nehemías 9: 36-37).

Esto está muy lejos de las promesas de los profetas con respecto a la bendición y restauración que Dios derramará sobre su pueblo.

Nehemías 10 y 11

10  Los que firmaron fueron: Nehemías el gobernador, hijo de Hacalías, y Sedequías,

Seraías, Azarías, Jeremías,

Pasur, Amarías, Malquías,

Hatús, Sebanías, Maluc,

Harim, Meremot, Obadías,

Daniel, Ginetón, Baruc,

Mesulam, Abías, Mijamín,

Maazías, Bilgai y Semaías; éstos eran sacerdotes.

Y los levitas: Jesúa hijo de Azanías, Binúi de los hijos de Henadad, Cadmiel,

10 y sus hermanos Sebanías, Hodías, Kelita, Pelaías, Hanán,

11 Micaía, Rehob, Hasabías,

12 Zacur, Serebías, Sebanías,

13 Hodías, Bani y Beninu.

14 Los cabezas del pueblo: Paros, Pahat-moab, Elam, Zatu, Bani,

15 Buni, Azgad, Bebai,

16 Adonías, Bigvai, Adín,

17 Ater, Ezequías, Azur,

18 Hodías, Hasum, Bezai,

19 Harif, Anatot, Nebai,

20 Magpías, Mesulam, Hezir,

21 Mesezabeel, Sadoc, Jadúa,

22 Pelatías, Hanán, Anaías,

23 Oseas, Hananías, Hasub,

24 Halohes, Pilha, Sobec,

25 Rehum, Hasabna, Maasías,

26 Ahías, Hanán, Anán,

27 Maluc, Harim y Baana.

28 Y el resto del pueblo, los sacerdotes, levitas, porteros y cantores, los sirvientes del templo, y todos los que se habían apartado de los pueblos de las tierras a la ley de Dios, con sus mujeres, sus hijos e hijas, todo el que tenía comprensión y discernimiento,

29 se reunieron con sus hermanos y sus principales, para protestar y jurar que andarían en la ley de Dios, que fue dada por Moisés siervo de Dios, y que guardarían y cumplirían todos los mandamientos, decretos y estatutos de Jehová nuestro Señor.

30 Y que no daríamos nuestras hijas a los pueblos de la tierra, ni tomaríamos sus hijas para nuestros hijos.

31 Asimismo, que si los pueblos de la tierra trajesen a vender mercaderías y comestibles en día de reposo, nada tomaríamos de ellos en ese día ni en otro día santificado; y que el año séptimo dejaríamos descansar la tierra, y remitiríamos toda deuda.

32 Nos impusimos además por ley, el cargo de contribuir cada año con la tercera parte de un siclo para la obra de la casa de nuestro Dios;

33 para el pan de la proposición y para la ofrenda continua, para el holocausto continuo, los días de reposo, las nuevas lunas, las festividades, y para las cosas santificadas y los sacrificios de expiación por el pecado de Israel, y para todo el servicio de la casa de nuestro Dios.

34 Echamos también suertes los sacerdotes, los levitas y el pueblo, acerca de la ofrenda de la leña, para traerla a la casa de nuestro Dios, según las casas de nuestros padres, en los tiempos determinados cada año, para quemar sobre el altar de Jehová nuestro Dios, como está escrito en la ley.

35 Y que cada año traeríamos a la casa de Jehová las primicias de nuestra tierra, y las primicias del fruto de todo árbol.

36 Asimismo los primogénitos de nuestros hijos y de nuestros ganados, como está escrito en la ley; y que traeríamos los primogénitos de nuestras vacas y de nuestras ovejas a la casa de nuestro Dios, a los sacerdotes que ministran en la casa de nuestro Dios;

37 que traeríamos también las primicias de nuestras masas, y nuestras ofrendas, y del fruto de todo árbol, y del vino y del aceite, para los sacerdotes, a las cámaras de la casa de nuestro Dios, y el diezmo de nuestra tierra para los levitas; y que los levitas recibirían las décimas de nuestras labores en todas las ciudades;

38 y que estaría el sacerdote hijo de Aarón con los levitas, cuando los levitas recibiesen el diezmo; y que los levitas llevarían el diezmo del diezmo a la casa de nuestro Dios, a las cámaras de la casa del tesoro.

39 Porque a las cámaras del tesoro han de llevar los hijos de Israel y los hijos de Leví la ofrenda del grano, del vino y del aceite; y allí estarán los utensilios del santuario, y los sacerdotes que ministran, los porteros y los cantores; y no abandonaremos la casa de nuestro Dios.

Los habitantes de Jerusalén
(1 Cr. 9.1-34)

11  Habitaron los jefes del pueblo en Jerusalén; mas el resto del pueblo echó suertes para traer uno de cada diez para que morase en Jerusalén, ciudad santa, y las otras nueve partes en las otras ciudades.

Y bendijo el pueblo a todos los varones que voluntariamente se ofrecieron para morar en Jerusalén.

Estos son los jefes de la provincia que moraron en Jerusalén; pero en las ciudades de Judá habitaron cada uno en su posesión, en sus ciudades; los israelitas, los sacerdotes y levitas, los sirvientes del templo y los hijos de los siervos de Salomón.

En Jerusalén, pues, habitaron algunos de los hijos de Judá y de los hijos de Benjamín. De los hijos de Judá: Ataías hijo de Uzías, hijo de Zacarías, hijo de Amarías, hijo de Sefatías, hijo de Mahalaleel, de los hijos de Fares,

y Maasías hijo de Baruc, hijo de Colhoze, hijo de Hazaías, hijo de Adaías, hijo de Joiarib, hijo de Zacarías, hijo de Siloni.

Todos los hijos de Fares que moraron en Jerusalén fueron cuatrocientos sesenta y ocho hombres fuertes.

Estos son los hijos de Benjamín: Salú hijo de Mesulam, hijo de Joed, hijo de Pedaías, hijo de Colaías, hijo de Maasías, hijo de Itiel, hijo de Jesaías.

Y tras él Gabai y Salai, novecientos veintiocho.

Y Joel hijo de Zicri era el prefecto de ellos, y Judá hijo de Senúa el segundo en la ciudad.

10 De los sacerdotes: Jedaías hijo de Joiarib, Jaquín,

11 Seraías hijo de Hilcías, hijo de Mesulam, hijo de Sadoc, hijo de Meraiot, hijo de Ahitob, príncipe de la casa de Dios,

12 y sus hermanos, los que hacían la obra de la casa, ochocientos veintidós; y Adaías hijo de Jeroham, hijo de Pelalías, hijo de Amsi, hijo de Zacarías, hijo de Pasur, hijo de Malquías,

13 y sus hermanos, jefes de familias, doscientos cuarenta y dos; y Amasai hijo de Azareel, hijo de Azai, hijo de Mesilemot, hijo de Imer,

14 y sus hermanos, hombres de gran vigor, ciento veintiocho, el jefe de los cuales era Zabdiel hijo de Gedolim.

15 De los levitas: Semaías hijo de Hasub, hijo de Azricam, hijo de Hasabías, hijo de Buni;

16 Sabetai y Jozabad, de los principales de los levitas, capataces de la obra exterior de la casa de Dios;

17 y Matanías hijo de Micaía, hijo de Zabdi, hijo de Asaf, el principal, el que empezaba las alabanzas y acción de gracias al tiempo de la oración; Bacbuquías el segundo de entre sus hermanos; y Abda hijo de Samúa, hijo de Galal, hijo de Jedutún.

18 Todos los levitas en la santa ciudad eran doscientos ochenta y cuatro.

19 Los porteros, Acub, Talmón y sus hermanos, guardas en las puertas, ciento setenta y dos.

20 Y el resto de Israel, de los sacerdotes y de los levitas, en todas las ciudades de Judá, cada uno en su heredad.

21 Los sirvientes del templo habitaban en Ofel; y Ziha y Gispa tenían autoridad sobre los sirvientes del templo.

22 Y el jefe de los levitas en Jerusalén era Uzi hijo de Bani, hijo de Hasabías, hijo de Matanías, hijo de Micaía, de los hijos de Asaf, cantores, sobre la obra de la casa de Dios.

23 Porque había mandamiento del rey acerca de ellos, y distribución para los cantores para cada día.

24 Y Petaías hijo de Mesezabeel, de los hijos de Zera hijo de Judá, estaba al servicio del rey en todo negocio del pueblo.

Lugares habitados fuera de Jerusalén

25 Tocante a las aldeas y sus tierras, algunos de los hijos de Judá habitaron en Quiriat-arba y sus aldeas, en Dibón y sus aldeas, en Jecabseel y sus aldeas,

26 en Jesúa, Molada y Bet-pelet,

27 en Hazar-sual, en Beerseba y sus aldeas,

28 en Siclag, en Mecona y sus aldeas,

29 en En-rimón, en Zora, en Jarmut,

30 en Zanoa, en Adulam y sus aldeas, en Laquis y sus tierras, y en Azeca y sus aldeas. Y habitaron desde Beerseba hasta el valle de Hinom.

31 Y los hijos de Benjamín habitaron desde Geba, en Micmas, en Aía, en Bet-el y sus aldeas,

32 en Anatot, Nob, Ananías,

33 Hazor, Ramá, Gitaim,

34 Hadid, Seboim, Nebalat,

35 Lod, y Ono, valle de los artífices;

36 y algunos de los levitas, en los repartimientos de Judá y de Benjamín.

Versión Reina-Valera 1960 © Sociedades Bíblicas en América Latina, 1960. Renovado © Sociedades Bíblicas Unidas, 1988.

La historia de Nehemías es de triunfo y desilusión. Su ministerio entre el pueblo de Israel tuvo fidelidad y fortaleza de su parte, pero fracaso y desanimo por parte del pueblo, como veremos al final del libro. En última instancia, el libro establece una expectativa: ¡la restauración que Dios prometió a su pueblo a través de los profetas aún estaba por venir, y ahora sabemos que esta restauración vino a través de la persona de Jesucristo!

¿Alguna vez has vivido una situación ante la cual tenías grandes esperanzas y expectativas, y te encontraste con una gran decepción? ¿Cómo se relaciona eso con la experiencia del pueblo de Israel después de su regreso del exilio?

¿Cómo una expectativa de restauración futura nos da esperanza y cambia nuestra vida aquí y ahora? ¿Cómo debemos vivir mientras esperamos con gran expectativa el regreso de Jesucristo y la restauración de todas las cosas?

Mayo 19 2020