Génesis 11:1-9

La torre de Babel

11  Tenía entonces toda la tierra una sola lengua y unas mismas palabras.

Y aconteció que cuando salieron de oriente, hallaron una llanura en la tierra de Sinar, y se establecieron allí.

Y se dijeron unos a otros: Vamos, hagamos ladrillo y cozámoslo con fuego. Y les sirvió el ladrillo en lugar de piedra, y el asfalto en lugar de mezcla.

Y dijeron: Vamos, edifiquémonos una ciudad y una torre, cuya cúspide llegue al cielo; y hagámonos un nombre, por si fuéremos esparcidos sobre la faz de toda la tierra.

Y descendió Jehová para ver la ciudad y la torre que edificaban los hijos de los hombres.

Y dijo Jehová: He aquí el pueblo es uno, y todos éstos tienen un solo lenguaje; y han comenzado la obra, y nada les hará desistir ahora de lo que han pensado hacer.

Ahora, pues, descendamos, y confundamos allí su lengua, para que ninguno entienda el habla de su compañero.

Así los esparció Jehová desde allí sobre la faz de toda la tierra, y dejaron de edificar la ciudad.

Por esto fue llamado el nombre de ella Babel, porque allí confundió[a] Jehová el lenguaje de toda la tierra, y desde allí los esparció sobre la faz de toda la tierra.

Versión Reina-Valera 1960 © Sociedades Bíblicas en América Latina, 1960. Renovado © Sociedades Bíblicas Unidas, 1988.

LA TORRE DE BABEL

ORA – Señor Dios, el lenguaje y el habla son unos maravillosos regalos tuyos y hoy te doy las gracias por ellos.

PARA REFLEXIONAR – La motivación para construir la Torre de Babel fue el orgullo. ¿Cómo puede el orgullo ser algo bueno y malo a la vez? ¿Qué ejemplos de ambos tipos de orgullo has visto?

APLICACIÓN – Haz una lista de las cosas por las cuales te sientes más orgulloso. Separa las que causan heridas o problemas. Rompe esa lista como símbolo de tu decisión de rechazar el orgullo injusto.

ORA – Dios, me siento orgulloso de ser llamado Tu hijo. Guárdame de cualquier orgullo que lastime a otros o te desagrade.